¿Cuánto sale tener hijos? Cuando pensamos en agrandar la familia lo primero que se nos viene a la mente (y está muy bien que así sea!) es la felicidad y la alegría que esto nos traerá (que es absolutísimamente cierto!).
Sin embargo, somos pocos los que -con la mente fría- hacemos un cálculo sobre cómo ello afectará nuestras finanzas, no para no tenerlos sino para prepararnos!
Desde ya que este artículo es pro familia y estamos felices de que muchos niños vengan a este mundo (yo tengo 2! Con eso les digo todo!).
Pero para que nosotros, los padres, también sigamos disfrutando y no estemos llenos de preocupaciones es importante estar organizados para atender este nuevo frente.
Hablemos un poco acerca de cómo planificar y organizar las finanzas de este nuevo hogar ampliado.
El embarazo: de las vitaminas a los tratamientos de fertilidad
Una de las primeras compras para la preparación del embarazo es el ácido fólico, de eso no se escapa nadie.
Y, una vez embarazadas, se suman otras vitaminas, la eco 5D -que muestra de forma anticipada la cara de nuestro ansiado bebé-, entre el montón de nuevas ofertas que el mercado del Babyboom nos ofrece.
Eso para el grupo de las que decidieron ser madres y se les dio sin mayores inconvenientes. Pero, cuando la vía natural no resulta, la planificación financiera va pidiendo más pista.
Es ahí donde aparecen los tratamientos de fertilidad (y sus costos). Si bien las obras sociales, medicinas prepagas o planes de salud cubren una cantidad de tratamientos por año, no siempre el centro de fertilidad que nos ofrecen es el que realmente queremos.
En consecuencia, debemos pagar un plan más elevado (fuera de presupuesto) o hacerlo de forma particular (más fuera de presupuesto aún).
A esto suele sumarse que muchos medicamentos necesarios para el tratamiento nuestro plan de salud no los cubre al 100% y debemos invertir en ellos.
Y ojalá tengamos éxito en el primer intento, ya que sino estos costos vuelven a repetirse hasta lograr el deseado embarazo. Ánimo!
El nacimiento: del parto a la doula
Con el embarazo, el recorrido recién comienza. Es a partir del nacimiento donde la cosa toma ritmo de verdad y los nuevos desembolsos de dinero se presentan como en catarata y en los más variados formatos y opciones.
Veamos algunos de ellos:
- Parto: ¿con el médico de la prepaga o pago particular el que quiero?
- Banco de células madre: ¿lo contratamos o no?
- Doula: ¿sí o no?
- En algunos países es común contratar una enfermera que nos acompañe en casa durante los primeros días del recién nacido, para adaptarnos a la nueva vida. ¿Lo hacemos?
Estos son sólo algunos de los interrogantes que se les pueden presentar. Mi recomendación en este caso es que, acorde a sus posibilidades económicas, definan cuáles son sus prioridades para invertir su dinero en ello.
Lo ideal, como siempre les digo, es no endeudarse y ver qué realmente tiene peso para cada uno e ir por ello.
La vuelta a casa: los muebles, la ropa, el plan médico y más
En este punto sí les resalto con énfasis “menos es más”. Sobre todo para las madres primerizas, donde la emoción nos desborda y hace que tomemos más decisiones emocionales que de costumbre y pasemos por alto y sin barreras nuestra conducta financiera. En este caso les digo: alto! reflexionemos.
Aquí les listo algunos tips para que consideren al momento de hacer las compras de esta etapa. Estos me fueron de gran utilidad y espero que también lo sea para ustedes:
- Cobertura de salud familiar: respecto a esto, lamento decirles, que hay pocas opciones mas que ajustar gastos – de ser necesario- y cubrir este nuevo costo
- Ropa: comprar a conciencia. Un bebé no precisa tanta ropa. Si nos excedemos van a ver que mucha ropa nunca llegan ni a estrenarla (porque crecen rápido, porque tenían un montón y se nos pasaron de largo, y así mil ejemplos más!) y quedó estancada en el cajón
- Cosas usadas: Aceptemos! ropa, bañera, zapatos. Nuestro hijo no va a ser más o menos feliz por usar solo cosas nuevas (ellos ni piensan en eso!) Ademas, ayudamos al planeta reutilizando productos ya fabricados.
- Juguetes: compremos los que necesitan y no un arsenal. Esto lo dice todo el mundo y es totalmente cierto! Gastamos un montón en un juguete carísimo y después juega con la caja! Ver para creer
- Cochecito o carrito: elijamos uno que nos sea práctico y funcional y no uno para el auto, otro para el paseo de todos los días y así, porque al final siempre usamos el mismo
- Leche: si eres de las que amamanta full, no hay gasto! Ahora, si te tocó fórmula, debes incluir este ítem en tu detalle mensual de gastos. Las mamaderas debieran ser un gasto de una única vez y, con el tiempo, ir cambiando las tetinas cuando sea necesario
- Esterilizador de mamaderas: puede ser práctico pero es caro y, la verdad, que hervir las mamaderas son 2 segundos y no sale nada
- Miles de extras: chupetes, pañales, gorrito, libritos, jabón hipoalergénico, clases de natación y muchosss más. Recuerden sumarlos al excel de gastos! Todos!
Esta lista es para que empiecen a incorporar estos items a su detalle y planificación de gastos mensuales de Costos Fijos y Gastos Variables . Don´t panic! Pero sí, organízate.
Los costos de la vuelta al trabajo
Por último, en el caso donde ambos padres deben volver a trabajar (tanto sea por elección como por obligación), los nuevos gastos que aparecen en esta etapa suelen incluir:
- Jardín maternal (para los que tomen esta opción).
- O cuidadora personalizada en casa.
- Alimentos a enviar al jardín (que también los tendríamos en casa, pero que debemos contemplarlos).
- Traslados, para aquellos donde esta nueva parada en su recorrido implique un incremento de este gasto.
Organizar este punto es fundamental ya que tiene un alto impacto en nuestras finanzas.
Familia feliz: costos proyectados y bien gestionados
La familia ampliada a veces implica también cambiar de casa y/o auto. Se verá para cada caso, pero lo que no cambia es la felicidad inmensa que esta decisión trae.
Por ello, para que este disfrute lo potencien al máximo, es que les aconsejo planificar bien sus gastos para que esta etapa que se inicia sea plena también a nivel financiero.
Mi mejor sugerencia es: planifiquen y organicen sus gastos. Como siempre les digo, no gasten más de lo que ganan, compren a conciencia y sólo si es necesario.
Y la buena noticia de esta nota se las dejé para el final, nuestros hijos solo nos darán gastos por algunos años…después ellos mismos generarán sus propios ingresos e inversiones.