Cuando comenzamos a introducirnos en el mundo de las finanzas personales y de las inversiones, es común que surjan dudas y alguna que otra confusión.
Entre las más habituales encontramos la siguiente: ¿Ahorrar e invertir es lo mismo?
La respuesta definitivamente es NO, pero entiendo porqué se presta a confusión.
Por ello, en este artículo te explico cuáles son las diferencias entre ahorrar e invertir.
Diferencias entre ahorrar e invertir
Ya dejamos en claro que ahorro e inversión no son lo mismo. Pero para definir qué es lo que marca la diferencia entre ambas actividades es necesario empezar por definirlas.
¿Qué es ahorrar?
Ahorrar es reservar poder adquisitivo para el futuro. En el ahorro, lo que hacemos es acumular los recursos de forma progresiva para poder disponer de estos cuando lo necesitemos más adelante.
Básicamente, las tareas que tendremos que hacer para ahorrar son:
- Gastar menos de lo que generamos.⠀
- Guardar la diferencia generada.⠀
- Poner el foco en conservar valor.⠀
¿Qué es invertir?
Invertir es comprar activos financieros para generar poder adquisitivo futuro. Cuando invertimos, lo que hacemos es usar nuestros ahorros para comprar instrumentos de inversión que, con el paso del tiempo, pueden crecer, generándonos una ganancia.
Las tareas que tendremos que hacer para invertir son:
- Elegir y comprar activos financieros para generar más de lo que generamos.⠀
- Reinvertir la diferencia generada.
- Poner el foco en conservar valor.⠀
Una clara diferencia entre ahorrar e invertir es que, cuando invertimos, necesariamente estamos asumiendo un riesgo.
Todo activo está sujeto al mercado financiero y por ello, este podría aumentar su valor, pero también perderlo.
Por eso, otra tarea implícita dentro de nuestra faceta como inversores consiste en determinar nuestro perfil de riesgo para constituir así un portfolio que se ajuste a nuestro horizonte de inversión y a nuestra tolerancia al riesgo.
Si quieres conocer más sobre este tema puedes revisar el artículo ¿Qué es una inversión?
Ahorrar e invertir, ¿qué hacer primero?
Aclaradas entonces las principales diferencias entre ahorrar e invertir, queda definir ahora… ¿por dónde comenzar?
Sin dinero guardado no podemos pensar en comprar activos financieros.
Contraer deudas para invertir generalmente es un error que puede salir muy caro. Por eso, mi recomendación es comenzar por el ahorro.
Este es el paso a paso de lo que considero esencial para empezar a poner en orden tu dinero:
- Ordenar las finanzas
Identificar cuál es nuestro punto de partida. Es decir, cuál es nuestro nivel de ingresos, nivel de gastos, deudas y, por supuesto, definir nuestros objetivos financieros, determinando si estos son de corto, mediano o largo plazo.
Esto nos permitirá determinar cuál es nuestra capacidad de ahorro o lo que es igual, cuánto dinero podemos ahorrar cada mes. ⠀
- Adquirir nuevos hábitos
Esto es fundamental, porque ahorrar no tiene tanto que ver con el conocimiento, sino más bien con los hábitos, con aquello que es parte de tu día a día.
Si ya sabes cuál es tu capacidad de ahorro, ahora solo resta pasar a la acción y conseguir esos resultados. Para ello, no queda más remedio que simplemente hacerlo y transformar al ahorro en una práctica cotidiana.
- Dejar ciertos gustitos para el futuro, cuando serán «gustazos»
Entre esos nuevos hábitos, indudablemente, está el hecho de hacer cambios en nuestro consumo. Muchos de los pequeños gustitos que hoy nos damos representan dinero que no estamos ahorrando y que, de alguna u otra manera, estamos desperdiciando.
Por supuesto que no se trata de ahorrar en todo y todo el tiempo, como ya he dicho en otras ocasiones. Pero si estamos comenzando a ordenar nuestras finanzas es importante minimizar esos gastos hormiga para ayudarnos a fortalecer el hábito del ahorro. ⠀
- Armar el fondo de emergencia⠀
Y sí, llegamos a uno de los puntos clave en lo que respecta al ahorro, se trata de armar el fondo de emergencia. Ese monto de dinero que reservamos para cubrirnos financieramente ante imprevistos. Una suma que nos deja la tranquilidad de saber que tenemos alguna cobertura en caso de que las cosas vayan mal.
Si quieres comenzar tu reserva de emergencia te recomiendo el artículo: Crear y administrar tu fondo de emergencia en 3 pasos.
- Empezar a invertir lo antes posible
Una vez que ya hemos realizado todo lo anterior, estamos en condiciones de comenzar a invertir.
Recuerda además la importancia que tiene precisamente el tiempo, en este caso, por el interés compuesto. Si no sabes de qué se trata, te recomiendo la lectura de la Guía sobre interés compuesto, donde te explico en detalle qué es y cómo calcularlo.
Últimas recomendaciones
Aunque parezca lo contrario, ahorrar puede ser más difícil que invertir. Como dije antes, el ahorro es un hábito, no es conocimiento que simplemente puedes adquirir.
Generar hábitos es más difícil que aprender algo, porque se necesita constancia y tiempo para establecerlos.
También es importante tener en cuenta que ahorro e inversión van de la mano.
Si gastas todo lo que ganas, nunca podrás invertir, ya que no contarás con el capital necesario para hacerlo.
Para terminar, quiero decir que sé muy bien que vivir por debajo de las posibilidades es «anti-social».
Tenemos la presión de tener la casa más grande, el auto más nuevo, enviar a nuestros hijos al mejor colegio, etc. Pero al final del día estamos hipotecando nuestro futuro y muchas veces el de nuestros hijos solo por cumplir con expectativas ajenas.
Poner en orden tus finanzas personales y comenzar a invertir es diseñar a tu medida el futuro que deseas.
Como digo siempre: que tus lujos sean el resultado de tus inversiones, no de tus deudas.