Las dudas al respecto de emprender y exportar nuestros servicios al mundo son varias: cómo empezar, dónde encontrar clientes, cómo recibir pagos del exterior y muchas más. De todas ellas hablamos en mi instagram. Pero una duda en particular que me hicieron bastante es qué servicios exportar. Qué servicios vender.

Pareciera que si no tenemos un empleo de tecnología o marketing no tenemos posibilidades de expandirnos al mundo, que si no estamos formados en la última herramienta de programación nuestro conocimiento no le va a interesar a nadie. Incluso una seguidora me preguntó si lo que ella hacía “era interesante” para empezar a monetizar y exportar. Todos esos límites que nos ponemos a la hora de emprender un nuevo camino no existen en la realidad, son solo propios y de eso hablamos en un módulo de mi curso de exportación de servicios.

En la actualidad hay mercado para todo lo que se imaginen, se puede triunfar en las redes y monetizarlas haciendo casi cualquier cosa. Las opciones son infinitas y basta con scrollear el inicio de cualquier red social para verlo: los tuits, las fotos, los videos que tienen más alcance e interacción no se relacionan con ninguna temática en particular, no son necesariamente de personas megaconocidas, muchas veces no son ideas geniales e innovadoras.

Empezá a pensar tus redes como un negocio, o tu negocio en las redes, con mi curso para Monetizar en Redes Sociales.

LULI INVIERTE

Es por eso que en este artículo les quiero comentar una serie de pasos para comenzar a pensar en un modelo de negocio que puedan vender y exportar al mundo.

1) Definir nuestra propuesta de valor

La propuesta de valor de nuestro producto, eso que lo hará diferente a los otros o que hará que tenga éxito, está relacionada con el problema que soluciona. ¿Cuál es el “punto de dolor” de nuestro cliente potencial que necesita solución?

Podemos tener una gran idea, pero si no soluciona un problema real, si nadie lo necesita, no vamos a encontrar clientes, no habrá nadie que quiera pagar por ello. 

El primer punto se trata de pensar: ¿por qué alguien pagaría por el servicio que yo estoy dando?

2) Definir tu cliente ideal

Acá vamos a ponernos creativos y definir quién tiene el problema que nosotros vamos a solucionar. Quién es ese cliente, cómo se ve, cómo se comporta, qué piensa, qué siente, cuál es su nivel de ingresos, dónde vive. Vamos a tratar de entenderlo para poder diseñar una solución que se adapte de la mejor manera a sus necesidades. 

Debemos definir si nuestro cliente será una empresa o una persona. Si es una empresa las preguntas que nos haremos serán distintas, pero tendrán el mismo objetivo: conocerla. 

El segundo punto, entonces, se trata de entender a nuestro cliente.

3) Definir nuestras acciones clave

Las acciones clave de nuestro negocio van a ser los pasos que debemos seguir para producir y entregar o brindar ese producto o servicio que estamos desarrollando.

Debemos pensar qué necesitamos hacer para solucionar el problema del cliente. Qué acciones concretas tenemos que realizar para dar una solución que le sirva al cliente, qué debemos tener en cuenta para esas acciones. 

El tercer paso se trata de pensar: ¿cómo desarrollo la solución que propongo?

Teniendo en cuenta estos tres pasos van a poder empezar a pensar en un posible negocio, uno que les permita emprender y, porqué no, venderle al mundo. Siempre partiendo de que conocemos, lo que sabemos o estudiamos. Pero también es una posibilidad adentrarnos en lo desconocido y estudiar a fondo el problema que sabemos que existe y queremos encontrar la solución.

Estos tres pasos y muchos otros más junto a ejemplos, recomendaciones, guías y tips accionables los pueden encontrar en mi taller CANVAS – Modelo de armado de negocios¡Se los recomiendo!

Recuerden que muchas veces no se trata nada más que del problema que resuelven, sino de cómo lo hacen: ese valor diferencial que solo pueden darle ustedes.

 Te enseño todo lo que aprendí haciendo una PyME Multinacional para que puedas internacionalizar tu emprendimiento o empresa.

LULI INVIERTE