Cuando se habla de inversiones, se suele considerar el éxito como consecuencia de la formación en Análisis Técnico que tiene el inversor. Pero hoy quiero hablarles del “Lado B”: invertir es más psicológico que técnico.

¿Cómo ser un buen inversionista?

Yo creo que para ser un buen inversionista se necesitan dos cosas básicas:

  1. Tener el conocimiento técnico básico para saber cómo moverse y operar en los mercados. Es decir, ser capaces de detectar oportunidades y de distinguir cuándo conviene comprar y cuándo vender. Como así también, en qué invertir (y en qué no, por supuesto). Si recién se inician en las inversiones les recomiendo hacer mi curso de Inversiones Basicas 
  2. Y segundo, pero no por eso menos fundamental: tener una mente fuerte. Si tenemos lo primero pero este punto falla, nuestras posibilidades de éxito bursátil tambalean…

Sigamos avanzando y les cuento por qué

La importancia del conocimiento técnico

La importancia del conocimiento técnico es innegable.

Con este artículo no pretendo deslegitimar lo fundamental y valioso que es contar con él si queremos obtener buenas ganancias en los mercados financieros.

Yo misma hago hincapié en ello todo el tiempo y les sugiero ver mi curso de Bolsa Avanzada: Análisis Técnico si quieren aprender más sobre este tema. 

Pero lo que sí pretendo es concientizar sobre cuán determinante es la fortaleza mental para triunfar en el mundo bursátil.

Si googlean a cualquier persona exitosa en este ambiente van a ver que todos coinciden en un punto: su mente aguda y analítica, pero también fría y resistente.

Es real que no se puede invertir con éxito sin tener una base de conocimiento, pero luego de ese mínimo conocimiento, lo que sigue es todo un juego mental. 

¿Influyen la mente y las emociones en el resultado de nuestras inversiones? 

Las emociones influyen (seamos concientes o no) en todos los aspectos de nuestra vida. ¿Cómo no iban a hacerlo también en las inversiones?

Nuestra parte emocional afecta nuestras decisiones. Cuáles tomamos, cómo, cuándo y por qué.

Más allá de que estudiemos una acción de arriba abajo, leamos todos los papers, blogs y diarios financieros del mundo, siempre hay una pizca emocional que se mete en ese debate y ayuda a inclinar la balanza.

Los miedos (el vender cuando todos venden, por ejemplo), las dudas, las ansias de ganar, la avaricia, incluso la alegría, todo eso y más pueden jugarnos malas pasadas si no tenemos la mente fuerte al momento de invertir.

La rentabilidad lograda es el resultado de las decisiones de inversión que tomamos. Entonces, si decidimos mal (sea por falta de conocimiento técnico o por factor emocional), las ganancias bajan. O aún peor, aumentan las pérdidas.

7 tips para ser un inversionista de mente fuerte

Si tu objetivo es ser un inversionista de mente fuerte, estos son algunos tips que te pueden servir para manejar mejor la montaña rusa emocional que conllevan las inversiones:

  1. Tener en claro tu horizonte de inversión: si el mismo es a 10 años, no te dejes asustar por bajas de un 20 o 30%. El camino es largo y vas a encontrarte con muchos altibajos. Lo importante es no perder el foco de la meta 
  2. Tener una estrategia de inversión bien definida, esto ayuda a ahuyentar temores ya que tenemos claro cuál es nuestro camino
  3. Estar dispuesto a que tu cartera pierda valor: esto va a pasar, así que mejor tenerlo claro desde un principio y actuar siempre estratégicamente y no guiados por la desesperación de las eventuales pérdidas (¿Es seguro invertir en Bolsa? )
  4. Tener siempre presente que si no vendemos cuando nuestra acción baja, no perdemos dinero
  5. Escribir las razones que mueven nuestras inversiones nos ayuda a tener más claridad y concientizar los pasos a seguir.
  6. No actuar por impulso: nunca. Ni estando en racha positiva, ni en racha negativa
  7. Nunca olvidar que no somos traders, por ende, nuestra carrera es otra y tenemos que saber jugarla según nuestros tiempos y metas

Seguir estos tips no significa que nunca más cometeremos errores emocionales en nuestras inversiones (de hecho a mí aún al día de hoy me siguen pasando), pero sí, al menos, acotamos márgenes.⠀

Tenés el control de tus inversiones

Las inversiones se caracterizan por ser vertiginosas y eso puede hacernos sentir gran éxtasis. Por eso es importante ser conscientes de ello y manejarlo para tomar decisiones financieras rentables.

No dejes que la montaña rusa emocional del mundo versátil te pase por arriba. Vos llevás las riendas y de esa manera se llega a la meta.

Por eso te dejo este consejo final: no te dejes llevar por la ambición ni los miedos, en las inversiones como en la vida, la calma siempre es la mejor consejera.